
La Plaza de Santiago, que junto al templo escenifica el alma y el folclore del arrabal, ahora barrio de Santiago, es un perfecto crisol de lo payo y lo gitano, lo próspero y lo exiguo, la tradición y la modernidad.
Junto al templo de Santiago el Mayor del s. XVI, el origen de la plaza es del s. XIII, cuando Alfonso X el Sabio ordenó construir una capilla fuera del recinto amurallado, junto a la Puerta de Santiago, entonces Puerta del Olivillo, en honor a Santiago, a la sazón patrón católico de Castilla.
Adornada con una bella fuente de estilo romántico, la fuente de la Plaza de Santiago pertenecía al patio del Hospital de Santa Isabel de Hungría. Este hospital surgió tras la desamortización del convento mercedario, siendo actualmente un instituto de enseñanza secundaria.