Plazas

Plaza de la Merced

La Plaza de la Merced fue una explanada extramuros que quedó entre el muro de la ciudad y el convento de los Mercedarios, construido tras la reconquista de la ciudad en el s. XIII.

El Convento de los Mercedarios pasó a ser Hospital Municipal tras la Desamortización de Mendizábal, quedando abierta al culto la iglesia conventual. Posteriormente pasó a ser Basílica de la Merced, donde se encuentra la Patrona de la ciudad y el mausoleo con los restos del general Miguel Primo de Rivera.
Durante los tiempos del Hospital Municipal, la plaza se denominó Alameda de Santa Isabel.

Entre las edificaciones notables que rodean la plaza destacan la Basílica de la Merced, de estilo gótico, levantada en el s. XVI, aunque su fachada es del s. XVII.

Justo en el lado opuesto a la basílica, decorre la calle Muro, donde se sustenta un lienzo de la muralla islámica de Jerez, siendo la mayor porción de ésta que se conserva en la ciudad.